DIARIOS
GRANDES PERSONAJES
En estos días, los titulares de los diarios limeños, incluído el decano "El Comercio", dan cuenta de grandes personalidades como Tula Rodríguez, Guisela Valcarcel, Roberto Martínez, los actorcillos de "Al fondo hay sitio", etc. Son noticia de primera plana en muchos diarios y en los interiores les dedican grandes espacios.
¿Esto le interesa a la gente media de nuestra capital? ¿Tan bajo está nuestro nivel cultural que estos personajes son noticia?, ¿Qué está pasando realmente?
Es preocupante darse cuenta del escaso nivel cultural e intelectual de nuestra capital, para no hablar del interior del país. Basta ver los kioskos colgando paskines que muestran gluteos obesos y accidentes sangrientos en sus páginas. El chisme ha sustituido a la noticia y el buen gusto cedió lugar a la huachafería.
El buen libro ha sido reemplazado por la televisión "chicha" y los buenos modales son cosas del recuerdo.
¡Claro! si se hace apología no sólo al terrorismo canalla que asesina seres humanos, sino también al mal gusto, al chantaje, a la mentira, al robo descarado, a la pillería, a la sinverguencería de saco y corbata, al compadrazgo, etc. etc.... "el Perú avanza"... pero el spot no dice hacia donde.
Nos hundimos en la "hiperinflación de la corrupción" (del libro aprista "HIperinflación I, según Alan García) y nadie dice nada o no se da cuenta. Parece que todos callamos ya que fuimos votantes y cómplices del "mal menor" que significó elegir al canalla Alan que según un e-mail que recibí, "se lleva al país sobre ruedas" y en silencio.
Seguiremos pagando a las Lori Berenson (US $ 30,000), seguiremos liberando terroristas y ladrones y seguiremos votando por sinvergüenzas que sólo buscan llenar sus bolsillos, seguiremos atorados en el tráfico infernal de esta Lima moderna y seguiremos viendo spots que dicen"EL Perú Avanza"...
En fin, en este aturdido país ya nada llama la atención, ni los espías, ni los ladrones. Los hogares destruidos por la modernidad, ni los gemelos que nacieron (o se hicieron gay, pobres padres), ni los curas pederastas, ni los candidatos que otrora estuvieron en la salita sel SIN.
Lo que queda, esperemos que dure mucho, son los hogares valientes que aun creen y viven en la crianza antigua y respetando al ser humano como tal, a pesar de las "modernidades" y los "tiempos que ya fueron".
SOLRAC
En estos días, los titulares de los diarios limeños, incluído el decano "El Comercio", dan cuenta de grandes personalidades como Tula Rodríguez, Guisela Valcarcel, Roberto Martínez, los actorcillos de "Al fondo hay sitio", etc. Son noticia de primera plana en muchos diarios y en los interiores les dedican grandes espacios.
¿Esto le interesa a la gente media de nuestra capital? ¿Tan bajo está nuestro nivel cultural que estos personajes son noticia?, ¿Qué está pasando realmente?
Es preocupante darse cuenta del escaso nivel cultural e intelectual de nuestra capital, para no hablar del interior del país. Basta ver los kioskos colgando paskines que muestran gluteos obesos y accidentes sangrientos en sus páginas. El chisme ha sustituido a la noticia y el buen gusto cedió lugar a la huachafería.
El buen libro ha sido reemplazado por la televisión "chicha" y los buenos modales son cosas del recuerdo.
¡Claro! si se hace apología no sólo al terrorismo canalla que asesina seres humanos, sino también al mal gusto, al chantaje, a la mentira, al robo descarado, a la pillería, a la sinverguencería de saco y corbata, al compadrazgo, etc. etc.... "el Perú avanza"... pero el spot no dice hacia donde.
Nos hundimos en la "hiperinflación de la corrupción" (del libro aprista "HIperinflación I, según Alan García) y nadie dice nada o no se da cuenta. Parece que todos callamos ya que fuimos votantes y cómplices del "mal menor" que significó elegir al canalla Alan que según un e-mail que recibí, "se lleva al país sobre ruedas" y en silencio.
Seguiremos pagando a las Lori Berenson (US $ 30,000), seguiremos liberando terroristas y ladrones y seguiremos votando por sinvergüenzas que sólo buscan llenar sus bolsillos, seguiremos atorados en el tráfico infernal de esta Lima moderna y seguiremos viendo spots que dicen"EL Perú Avanza"...
En fin, en este aturdido país ya nada llama la atención, ni los espías, ni los ladrones. Los hogares destruidos por la modernidad, ni los gemelos que nacieron (o se hicieron gay, pobres padres), ni los curas pederastas, ni los candidatos que otrora estuvieron en la salita sel SIN.
Lo que queda, esperemos que dure mucho, son los hogares valientes que aun creen y viven en la crianza antigua y respetando al ser humano como tal, a pesar de las "modernidades" y los "tiempos que ya fueron".
SOLRAC
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